La
Sensación corporal se desarrolla en los primeros dos años
de vida. Tenemos un cuerpo, sentimos su cercanía y su calidez. Tiene
sus propios límites que nos alertan de su existencia a través
del dolor y la injuria, el tacto o el movimiento. Allport hacía
gala de una demostración en este aspecto del Self: imaginemos que
escupimos dentro de un vaso y…¡luego nos lo bebemos! ¿Qué
pasa; ¿dónde está el problema? ¡Desde luego
es la misma cosa que nos tragamos todos los días! Pero, por supuesto
ha salido de dentro de nuestro cuerpo y se ha vuelto algo extraño,
y por tanto, ajeno a nosotros.
La
Identidad Propia (del Self; de uno mismo) también se
desarrolla en los primeros dos años de vida. Hay un momento en nuestra
vida donde nos consideramos como entes continuos; como poseedores de un
pasado, un presente y un futuro. Nos vemos como entes individuales, separados
y diferenciados de los demás. ¡Fíjense que incluso
hasta tenemos un nombre! ¿Serás la misma persona cuando te
levantes mañana? Claro que sí. Desde luego, asumimos esta
cuestión.
La
Autoestima se desarrolla entre los dos y los cuatro años
de edad. También llega un momento donde nos reconocemos como seres
valiosos para otros y para nosotros mismos. Esta circunstancia está
íntimamente ligada al desarrollo continuo de nuestras competencias.
Para Allport, ¡esto es realmente el estadio Anal!
La
Extensión de uno mismo (extensión del Self)
se desarrolla entre los cuatro y seis años de edad. Algunas cosas,
personas y eventos a nuestro alrededor también pasan a ser centrales
y cálidos; esenciales para nuestra existencia. ¡”Mío”
es algo muy cercano a “Mi” (“yo”) Algunas personas se definen a sí
mismas en virtud de sus padres, esposas o hijos; de su clan, pandilla,
comunidad, institución o nación. Otros hallan su identidad
en una actividad: soy un psicólogo, un estudiante o un obrero. Algunos
en un lugar: mi casa, mi ciudad. ¿Por qué cuando mi hijo
hace algo malo, me siento culpable? Si alguien raya mi coche, ¿por
qué siento como si me lo hubieran hecho a mí?
La
Auto imagen (imagen de uno mismo) también se desarrolla
entre los cuatro y seis años. Este sería “el reflejo de mí”;
aquel que los demás ven. Esta sería la impresión que
proyecto en los demás, mi “tipo”, mi estima social o estatus, incluyendo
mi identidad sexual. Es el principio de la conciencia; del Yo Ideal y de
la “persona”.
La
Adaptación racional se aprende predominantemente entre
los seis y doce años. El niño empieza a desarrollar sus habilidades
para lidiar con los problemas de la vida de forma racional y efectiva.
Este concepto sería un análogo a la “industria” o “industriosidad”
de Erickson.
El
Esfuerzo o
Lucha propia usualmente no empieza hasta
después
de los doce años. Sería la expresión de mi Self en
términos de metas, ideales, planes, vocaciones, demandas, sentido
de dirección o de propósito. La culminación de la
lucha propia sería, según Allport, la habilidad de decir
que soy el propietario de mi vida; el dueño y operador.
(¡No podemos evitar la observación de que los períodos
evolutivos que usa Allport son muy cercanos a los periodos de desarrollo
que utiliza Freud en sus estadios! Pero, es importante que precisemos que
el esquema de Allport no es una teoría de estadios evolutivos; es
sólo una descripción de la forma en que las personas generalmente
se desarrollan.)